En los adultos las pieles sensibles pueden ocasionar serios problemas de adaptación y de salud.
Sin embargo, en niños y bebés, es aún más engorroso y peligroso para el niño.
Os damos algunos consejos, para que desde casa podáis mantener sana la piel de vuestros hijos:
1. Que el baño no dure más de la cuenta. Cuidando en todo momento la temperatura del agua y haciendo uso de jabones con pH neutro.
2. Evitar zonas con humedad es importante para la piel del bebé, además los cambios de temperatura brusca también afectan a la epidermis.
3. Las uñitas de los bebés, deben estar siempre bien cortadas y limadas, para que no se arañen en caso de algún picor.
4. No bañar al bebé cada día.
5. Hidratar la piel del bebé con una crema emoliente, aplicándosela con cuidado y masajeando la zona.
6. Al secar la piel, no frotar con la toalla, si no, dando pequeños toquecitos allí donde queremos secar.
7. Atención a los pañales, estudios recomiendan usar pañales desechables compuestos de fibras orgánicas o lavables de tela.
En caso de que tú bebé, disponga de una piel muy sensible o con psoriasis o irritaciones graves, recuerda siempre, consultarnos. Ya que, estas enfermedades no sólo acarrean incomodidades, pueden llegar a ocasionar infecciones y graves grietas en la piel.